Consejos para remoción de hongos en las prendas
La ropa es un elemento importante para nosotros, que cumple con su función primaria que es abrigar, sin embargo con el paso del tiempo la estética de la misma ha venido adquiriendo gran importancia últimamente. Por lo general no se recomienda el lavado de ropa con agua caliente, sobre todo la de algodón porque ésta se podría encoger, aunque a veces va a ser necesario la utilización de altas temperaturas en el agua.
Existe un hongo que al adherirse a la ropa puede causar dermatitis y problemas de infección. Removerlo de la ropa resulta algo complicado ya que se requiere de un desinfectante especial, no basta con un limpiador de cloro común, ya que el hongo Cándida es muy resistente.
El agua caliente es una gran opción para la eliminación de hongos, para eso, se tendrá que acondicionar el calentador de agua a su máxima temperatura. Después preparar una tina de 5 o más litros de capacidad y llenarla con agua caliente; inmediatamente se añadirán poco más de 10 mililitros de desinfectante hasta que se diluya por completo.
Antes de sumergir la ropa dañada por el hongo en la tina con la solución, es recomendable usar unos guantes (no muy gruesos) para las manos, sobre todo si se tiene una piel muy sensible, ya que podría haber irritaciones por el contacto con el desinfectante. Ya una vez sumergida la prenda, se tallará de manera uniforme y constante en la zona contaminada, sin ser tan brusco, después se deja reposar la ropa unos 5 minutos y se secará al aire libre, colgándolo en el tendedero, procurando exponerlo a la luz solar.
Uso de la lavadora para desinfección de ropa
Si se cuenta con lavadora, entonces hay que programarla para un ciclo corto y con agua caliente; la lavadora tiene que estar conectada a las llaves del boiler. Un consejo para que esto sea evitable, es que si la indumentaria que se trae puesta se moja o está húmeda, lo mejor es quitárnosla de inmediato. Si el uso de la prenda es indispensable y el hongo está activo, entonces por lo menos se deberá usar una prenda de algodón como ropa interior, para eludir una infección corporal.
Con las toallas es lo mismo, pero de manera más agresiva, ya que éstas son las que usamos diariamente para secarnos el cuerpo y cara. Para culminar se aconseja utilizar una plancha caliente para remover cualquier vestigio del hongo.