Tratamiento en boilers de vapor para evitar hongos y otros contaminantes
La caldera y todo el sistema de tuberías para la generación de vapor y otras aplicaciones sanitarias, son elementos muy importantes, su mantenimiento debe ser constante. Antes hablamos que la calidad del agua está fundamentada en los compuestos que los diferentes metales o vitrificados generen en las tuberías o tanques, así como las incrustaciones, los factores pH y otros elementos.
La corrosión en un sistema como de caldeamiento es inherente cuando no se extreman precauciones; afecta a los tubos, tanques, componentes y el agua misma, que por consiguiente pueden generar paros indeseables y sin previo aviso, por ello la importancia de tratar con tiempo esta problemática.
Bacterias como la E. Coli, legionella, entre otros suelen estar presentes. Algunos expertos aseveran que cuando un sistema está compuesto por cobre, su aparición es mínima, con indicadores de erradicación que sobrepasa el 90%, aunque no en todos los casos, porque también depende del uso que se le dé a la caldera como tal.
Procesos para un buen tratamiento de los aparatos de caldeamiento
Como ejemplos, podemos mencionar varios procesos que ayudan a un buen tratamiento de los aparatos de caldeamiento:
1.- Acondicionador polimérico para boilers.
Simple y sencillo, mediante una purga normal, este aditamento se encargará de diseminar las impurezas presentes, así como erradicar los lodos que se acumulen y cualquier otro desecho en superficies y tuberías. Su aplicación puede ser de manera manual o automática. Otras características que tienen estos acondicionadores es que trabajan bajo condiciones extremas sin ningún problema y lo más importante, no daña el metal, ya sea cobre o aceros. Solamente hay que estar atento a las indicaciones del fabricante, tanto en su dosificación como en los compuestos que contenga dicho acondicionador.
2.- Tratamientos preventivos mediante líquidos especiales.
Ahora bien, existen procedimientos para controlar la incrustación y la misma corrosión, para ello hay aditamentos muy especiales que pueden tener estas características:
- Control de espuma y residuos generados por el sistema.
- Solubilidad completa en agua, lo que permite un efectivo trabajo.
- Atrapa las moléculas de oxígeno que se diluyen en el agua.
- Previene la incrustación y corrosión.
- Prevención de sedimentos.
- Prevención de formaciones cáusticas, controlando el agua alcalina.
Solo hay que adquirir los de mejor calidad, es decir, aquellos que no dañen los dispositivos de caldeamiento y las bombas que proveen el agua. También el fabricante le tiene que especificar cosas como: purgaciones, tomas de pH, concentraciones de sólidos, funcionamiento, etc.
3.- Desincrustantes para agua.
Lo normal es que este tipo de productos tenga como característica principal una mezcla polimérica de poliacrato de sodio, que precisamente es ideal para que se apliquen en calderas y en la sedimentación de las mismas. Precisamente sus polímeros están hechos para separar y acondicionar los sólidos que se encuentran en suspensión, así como desperdicios y otros desechos; su erradicación total es por medio de una purga.
Su apariencia en completamente líquida y sin color, con un pH de 12.5, una densidad de 0.9 mg/lt, una solubilidad al 100%, sin ser viscosos y con una biodegradación que sobrepasa el 90%. El fabricante le tiene que explicar cómo se conserva tal líquido y bajo qué condiciones y pueden venir en varias presentaciones.
4.- Fórmula especial para el mantenimiento de agua en dispositivos de caldeamiento para el procesamiento en la industria alimentaria.
Este es un elemento sumamente específico en dichos tratamientos, cuyos procesos de vapor tienen contacto directo con los alimentos. Su trabajo esencial es el controlar las picaduras superficiales y evitar la corrosión en depósitos.
Otras características:
- Trata la alcalinidad del agua, y de esa manera se previenen las formaciones cáusticas.
- Evita que las tuberías por las que pasa el vapor se corroan y sufran de incrustaciones.
- Atrapa las moléculas de oxígeno que se disuelven en el agua.
- Además de que dichas fórmulas especiales se pueden disolver con facilidad en el agua.
Hay que asegurarse que estos tratamientos estén libres de cromatos u otras fuentes de contaminación, y más en el ámbito de los alimentos. Por ello es fundamental que el fabricante proporcione todas las especificaciones mediante un manual y si es posible, una demostración práctica para el sistema.