La importancia de controlar el pH en el agua de los sistemas de caldeamiento
Ya hemos visto lo que puede hacer una concentración importante de sílice en los sistemas de caldeamiento, donde rotores, álabes de turbinas, tuberías, y otros elementos de la red pueden verse en riesgo de afectación, lo que obviamente llevaría a costosas reparaciones y se perdería tiempo y dinero por los paros imprevistos. Asimismo checamos cómo trabaja el afino de condensado en esta clase de sistemas, cuya desmineralización y filtro son las palabras clave para mantener a raya aquéllos sólidos que atenten contra los boiler. Ahora hablemos de las aminas.
En las líneas de condensado, como las de vapor o de retorno, es común que se presenten reacciones que afecten a nuestro sistema de caldeamiento por medio de la corrosión, y es que el agua al entrar en contacto con el CO2, se formará invariablemente el ácido carbónico; igualmente está muy demostrado que el mismo CO2 puede ser formado por la alcalinidad del bicarbonato.
¿Para qué sirven las aminas neutralizadoras en el sistema de calderas?
La morfolina, ciclohexilamina y dietanolamina son aminas que existen esencialmente para equilibrar los niveles de pH en el agua del sistema de boiler. Por otro lado, existe un tratamiento que facilita el manejo en la inclusión de otros químicos o componentes orgánicos para el mantenimiento del agua. A dicho procedimiento se le llama tratamiento volátil de amoniaco e hidracina; como decíamos, si se ejecuta correctamente tal método, podremos ahorrar mucho dinero en el control de la alcalinidad del agua. Sin embargo hay que tener mucho cuidado, porque si empleamos el amoniaco en proporciones desmedidas, lo único que tendremos es una corrosión segura en el sistema y sus componentes, recordemos que el pH es muy susceptible a aumentar al entrar en contacto con amoniaco excesivo.
Para tener un eficiente tratamiento del amoniaco e hidracina, se aconseja informarnos adecuadamente en cuanto a la inyección química, y cuáles podrían ser los posibles inconvenientes al combinarla con los procedimientos antes mencionados.
¿Para qué sirven las aminas de película en el sistema de calderas?
Las aminas de película son esenciales para proteger todo nuestro sistema de boiler, es decir, tratar de evitar que el metal de tuberías, condensados, evaporadores, y otros elementos, se dañen por acción de la corrosión, y es que los componentes químicos potenciales siempre estarán latentes para afectar las redes de caldeamiento.
Si tenemos boiler que funcionen por arriba de 200 psi y que además trabajen con un 75 por 100 o más de retorno de condensado, deberemos sustituir las aminas de película por unas aminas neutralizadoras, de esa forma podremos garantizar una protección extra en las capas protectoras del metal del boiler, así como sus componentes; es trascendental no permitir roturas en el acero del sistema.
Las consecuencias del primado en las calderas y cómo controlarlas
Cuando el agua del sistema se eleva con el flujo de vapor, la mezcla pasará a través de las líneas de vapor con una velocidad y fuerza tal, que dañarán gravemente el sistema de caldeamiento, siendo los motores y turbinas los elementos normalmente afectados; a esto se le llama primado. El operador de caldera es capacitado para resolver tales problemas por medio de las siguientes acciones o procedimientos.
1.- Por ningún motivo forzar un sistema de caldeamiento que esté con conexión a máquinas de vapor, como turbinas u otra clase de motores.
2.- Establecer un equilibrio en los niveles de agua de boiler a fin de no incentivar las fluctuaciones de la misma.
3.- Tras un tratamiento químico en el agua del sistema, es trascendental realizar el adecuado procedimiento de purga, ya sea a nivel superficial o más profundo.
4.- Se debe cuidar o controlar las válvulas que regulan el vapor, tanto de turbinas o de los mismos motores.
Los golpes de agua son capaces de arrastrar impurezas que eventualmente se convierten en depósitos, y tales incrustaciones afectan todo el sistema; hay que tener cuidado con eso.