Medidas o alternativas para el ahorro en calefactores y cómo elegir el sistema más efectivo
En el artículo anterior (Tipos de sistemas de calefacción y cómo ahorrar energía de forma más eficiente. Segunda Parte), se recalcó lo importante que es dar el adecuado mantenimiento a las partes del sistema como bombas, tuberías, aparatos de medición, entre otros, para que haya un ahorro óptimo de la energía. En este artículo nos enfocaremos en saber cuál es el sistema calefactor más recomendado o funcional, así como conocer acerca de otras alternativas para el ahorro energético.
En sistemas calefactores más simples, los sistemas de control son más sencillos, eso es porque una única caldera es la que proporcionará agua caliente a una sola vivienda; este dispositivo de control posee un termostato y el panel de la caldera.
¿Qué reglas elegir para el ahorro en instalaciones individuales?
Purgar.- Es necesario realizar una purgación para eliminar el aire acumulado en la instalación. El hacerlo de manera correcta logrará mejorar el rendimiento del sistema sustancialmente. Si el purgador funciona manualmente, se tiene que abrir el purgador lentamente, si es automático, entonces se expulsará el aire de forma independiente (si es que los radiadores son de aluminio).
Termostato y temperaturas.- Como ya se ha mencionado, el checar que el termostato funcione es trascendental para que funcione adecuadamente el dispositivo. Hay que programarlo por horarios, es decir, cuando se esté usando, cuando no se utilice, cuando sea hora de dormir, fines de semana, etc. Se recomienda calentar el hogar hasta los 20 grados durante los días invernales y enfriar en el verano hasta los 25.5 °C.
En los días con temperaturas exteriores constantes, es necesario fijar la temperatura entre los 20 o 21 grados centígrados, ya que por cada grado aumentado el consumo se eleva hasta en un 7%. También es aconsejable regular la temperatura a los 18 °C en el horario de la noche.
Caldera.- Es imprescindible hacer un análisis preciso de la combustión de la caldera, ya que las concentraciones de gases contaminantes pueden ser peligrosos para un complejo o una casa. Hay que checar los gases de combustión como oxígeno (O2), dióxido de carbono (CO2), Monóxido de carbono (CO), Nitrógeno (N2), Óxidos de nitrógeno (NOx), Dióxido de azufre (SO2). Si presenta defectos, entonces será necesario cambiar la caldera por una de combustión.
Válvulas termostáticas.- La instalación de la válvula termostática en cada radiador asegurará un control de flujo del líquido regrigerante que ingresa al evaporador y que dicha mezcla pase por completo a su fase gaseosa, al absorber de manera eficiente el calor del medio que esté enfriándose. Para ese efecto también se recomienda que la temperatura de impulsión del agua caldeada sea fijada correctamente.
¿Cuál es el sistema calefactor más eficaz?
Es normal que las tendencias actuales sea la de instalar calderas individuales o por separado, sin embargo está comprobado que aunque los sistemas centralizados hayan pasado de moda, son la mejor opción en cuanto a eficiencia energética y siguiendo las instrucciones de mejora de instalación, temperatura y medidores de energía.
Hay muchas razones por las cuales una red centralizada de caldeamiento es mejor que las individuales, una de ellas es que al haber una fuente calorífica única, la reducción de la factura de combustible será una realidad, es decir la gestión de la energía es más precisa y conveniente. Un dispositivo individual y uno centralizado o comunitario requieren gastos de mantenimiento y de combustible, la diferencia es que en la red centralizada los gastos se podrán repartir entre todos los propietarios, convirtiéndose en una forma de ahorro sustancial.
Otra razón es la seguridad que conlleva la instalación de un mecanismo de caldeamiento, ya que por lo regular éstas se sitúan en las afueras de las viviendas o un complejo, en un área específica. Además un sistema centralizado verá reflejada una mayor efectividad con los adecuados controles de medición.
